¿Qué sabes del aceite de coco para el control de peso?
¡¡Cómo incorporarlo en la dieta!!
¿Cómo es posible que una grasa, hasta hace poco considerada perjudicial, sea tan beneficiosa para la salud y encima nos ayude a controlar nuestro peso?
El aceite de coco que nos interesa y del que vamos a hablar es el virgen, biológico y obtenido de la pulpa fresca y madura del coco por medios naturales.
El aceite de coco es una grasa saturada, no debemos confundirla con las hidrogenadas que son las perjudiciales. Está compuesta por ácidos grasos saturados de cadena media, y esto es precisamente, los triglicéridos de cadena media “MCT», lo que le confiere tan buenas propiedades al aceite de coco.
Los MCT al ser ingeridos pasan directamente al intestino sin necesidad de ser digeridos previamente en el estómago por la bilis. Luego pasan la barrera intestinal y llegan al hígado para ser procesados y convertidos en cuerpos cetónicos cuya misión es suministrar energía al organismo, principalmente al corazón y cerebro. Por ello el aceite de coco es un combustible muy eficiente.
Si acostumbramos al organismo a utilizar la grasa como fuente de energía, que es algo para lo que estamos adaptados genéticamente, obtendremos mayor eficiencia metabólica y, además, una disminución de los niveles de insulina. De ahí su poder saciante y regulador del apetito. Facilitamos el control de nuestro peso. La dieta se hace más rentable.
¿Cómo podemos incorporar el aceite de coco en nuestra dieta?
El aceite de coco se puede utilizar en la cocina como cualquier otro aceite, con la ventaja de que es un aceite muy termoestable. Es útil para cocinar y soporta altas temperaturas. Pero aquí lo que nos interesa es cómo y cuándo tomarlo si lo que queremos es controlar el peso. Para ello, lo que recomiendo es hacer un ayuno de 12 a 16 horas (ya hablaré de los beneficios del ayuno intermitente). Que entre la cena y el desayuno pasen al menos 12 horas. Por ejemplo, ceno a las 21h y desayuno a las 9h. Y el desayuno va a consistir en infusión, café y/o cacao puro con una cucharadita de aceite de coco. Al incorporar como único nutriente el aceite de coco (nada de leche, zumos, azúcares….) el organismo tiene que obtener la energía de las grasas de reserva, facilitando el aceite de coco la obtención de cuerpos cetónicos que son el combustible. Lo ideal sería no comer nada hasta el almuerzo. Así permitimos controlar mucho mejor el peso corporal. Es obvio decir que la dieta debe ser saludable, evitando alimentos procesados como azúcares o hidratos de carbono refinados…. además debe ser rica en verduras, frutas y proteínas. Y por supuesto hay que moverse!!!!
Yo me preparo mi bebida energética de la siguiente manera y ¡¡me encanta!!
1 cucharadita de Café Natural Bio para 200ml de agua, lo hago filtrado.
1/2 cucharadita de Cacao Puro Bio de El Granero Integral
1 cucharadita de Aceite de Coco Virgen Extra Bio
Lo bato con la batidora para que se mezclen bien los ingredientes.
Hay más beneficios del aceite de coco de los que hablaremos en otra ocasión: es antiinflamatorio, antiséptico, aumenta las defensas, mejora la memoria.
